Me dejé romper el culo para pagar las deudas de mi novio
Mandarme a negociar su deuda para que no lo molieran a palos no fue la mejor idea que mi novio pudo haber tenido. El tío no estaba dispuesto a perdonarle un solo céntimo, y mucho menos a renegociar la fecha de pago. Para colmo, no paraba de mirarme las tetas y el culo desde que entré por la puerta, así que lo mejor que pude negociar fue dejarme follar a cambio del dinero. Claro que el chaval no estaba dispuesto a ceder tan fácil, y la follada tendría que ser por el culo y mientras me grababa. Quería asegurarse de que mi novio viera el video de la enculada que me daba, para hacerlo sentir bien cornudo y darle una buena lección.