Pareja española me invita a hacer un trío en público en la playa
No se si fue por suerte o por oportunismo, pero que me inviten a montar un trío en la playa, en público y al aire libre, no es algo de todos los días. Menos aun que la tía encima esté buenísima, como lo estaba esta española casada que tenía más ganas de comerse dos pollas que de complacer al marido. Porque en realidad se suponía que todo era parte de una fantasía del cornudo del esposo, pero al final resultó ser que no. Por la forma en la que me comió la polla y lo mucho que gritaba y gemía para llamar la atención y que todos la vieran mientras se la follaban de dos en dos, evidentemente ella estaba más interesada en exhibirse que él.