Jovencitas tetonas emocionadas quieren hacer un trío
Hay un chico en la escuela que me gusto a mí y a mi amiga. Cada vez que lo vemos podemos escuchar los latidos de nuestro clítoris, nuestro coño se moja. Nos emociona tanto que ya no nos preocupamos por encubrirnos, solo queremos su polla dentro de nosotras. Una vez que lo seguimos al baño, lo encerramos y mi amiga lo besó, lo forcé a tocar mis grandes tetas. Como estábamos en la escuela, no queríamos hacer nada más y lo dejamos ir. Pero después de ese día, nuestro deseo ha aumentado aún más. Un día estaba en la sauna y entramos, no tuvo oportunidad de escapar. Como estaba desnudo, lo aproveché y me puse su polla en la boca, no lo dejé ir hasta que se corrió en mi cara.