Beatrice Segreti seduce al entrenador y consigue que se la folle
A Beatrice Segreti no se le había cruzado por la cabeza la idea de tener sexo con el entrenador hasta que lo conoció. En ese preciso instante, decidió que aquel hombre tenía que ser suyo, y fue al baño a arreglarse para verse más guapa. Durante el entrenamiento, no pararon de coquetearse mutuamente. Era evidente que ambos se gustaban. Él la apoyaba por detrás siempre que podía, y ella le restregaba el culo en la polla alevosamente. Finalmente, decidieron dejar los aparatos de gimnasia y ponerse a follar. El entrenador le bajó el pantalón y las bragas, le hincó la polla desde atrás y le echó un polvo de muerte a la zorra de cabello rizado.