Grabé con una cámara oculta la follada con la mujer de mi amigo
La mujer de mi amigo y yo nos teníamos ganas desde hacía mucho tiempo. No fueron pocas las veces que le confesé en privado lo mucho que me gustaba y cuanto me gustaría follármela. Ella reía, me besaba y me decía que lo nuestro era imposible, hasta que un día me tocó la polla. Lo hizo a modo de broma pero yo entendí que me tenía tantas ganas como yo a ella, así que le dije que la esperaba al día siguiente en mi casa. Esa tarde me la follé en tantas posturas que perdí la cuenta de cuantas veces me corrí. Ella estaba tan cachonda que me chupó la polla con un entusiasmo increíble y quedó encantada. Por suerte grabé todo con una cámara oculta, por si no volvíamos a follar nunca más.