Mi cuñado me da polla mientras mi marido cornudo está cocinando
Una sola vez había follado con mi cuñado y me sentí tan culpable que nunca más volvimos a hacerlo. Cada vez que venía a casa me sentía muy incómoda y no paraba de recordar el polvazo que me echó. El tiempo pasó y no volvimos a verlo durante varios años hasta que regresó de visita. Ese día estaba más cachondo que nunca. Volver a verme lo puso a mil por hora y empezó a meterme mano sin que mi marido se diera cuenta. Al final logró calentarme tanto que dejé que volviera a follarme pero, esta vez, detrás de la puerta, mientras el cornudo de mi esposo estaba cocinando para nosotros.