Morena española empieza a jugar a ser la puta de la acera para recaudar dinero
Cuando se trata de dinero, ya nadie quiere ayudarte. Por eso Paula decide salir a la carretera. Ella piensa que para ser prostituta solo necesitas ponerte un pantalón corto y esperar en una acera a que alguien le pida que suba al auto. Y tiene toda la razón. Le toma diez minutos que un cliente se le acerque. Por un momento tiene dudas, pero solo se necesita un poco de coraje para encontrarse con su culito al descubierto y una polla frotándose en la hendidura de su culo. Su primer polvo de puta que no olvidará. Los otros tal vez sí.