Suzie Sun acepta la propina para hacer un masaje con final feliz
La masajista Suzie Sun ya había masturbado a varios de sus clientes, por eso cuando este chaval le ofreció una buena propina a cambio de que le hiciera un final feliz, no se lo pensó dos veces. Claro que, ante la importante oferta, no se limitó a darle masajes y hacerle una paja. La guarra se metió ese rabo en la boca y le gustó tanto que no podía parar de mamarlo. Después de que Suzie le chupara bien la polla, el cliente estaba que se salía de la calentura, así que le preguntó si podía follársela y ella le respondió que sí.